Uva: 100 % Moscatel de Alejandría.
Graduación: 15 % vol.
Temperatura recomendada de servicio: 6–8 °C.
Estilo: vino dulce natural (mistela / vino de licor), producción tradicional, ideal para postres, quesos, etc.
Al servir Maset Moscatel de Alejandría, su color se presenta como un ámbar profundo con reflejos dorados, típico de un vino dulce natural elaborado con moscatel.
La limpidez y el brillo suelen ser notables, dando una sensación visual de densidad y dulzura.
La nariz es intensa, perfumada y envolvente. Algunos de los aromas típicos:
Frutas cítricas confitadas — como piel de naranja confitada o cítricos maduros.
Flores delicadas — notas florales finas, como pétalos de rosa o de flores mediterráneas, que aportan perfume y elegancia.
Miel — un matiz dulzón, profundo, casi de pasas o de flores secas que recuerda a miel.
En conjunto, la nariz es dulce, perfumada y envolvente — como un ramo de flores maduras sumado a fruta confitada y miel, anunciando su carácter de vino generoso y goloso.
La experiencia en boca del Maset Moscatel de Alejandría confirma lo que sugiere la nariz, con un perfil profundamente dulce, frutal y envolvente:
Sensación general: untuosa, glicérica — textura suave, llena, con cuerpo medio-alto, acorde a su perfil de vino de licor.
Sabores predominantes: fruta madura (melocotón, membrillo), higos secos — combinados con esa dulzura característica de la moscatel.
Equilibrio dulce-acidez: aunque su dulzura es evidente, la estructura mantiene cierta frescura que evita que resulte empalagoso.
Final: largo y persistente, con recuerdos de fruta madura, miel y confitura — dejando un posgusto meloso, envolvente.
En resumen: es un vino de dulzura generosa, textura amable y sabrosa, con fruta madura, miel y un carácter mediterráneo perfumado que invita a beber despacio, como vino de meditación o de postre.
Este tipo de moscatel de licor — dulce, aromático y suave — combina especialmente bien con:
Postres: tartas de fruta, pasteles, helados, turrones, repostería dulce — su dulzura y aromas florales potencian el postre.
Quesos: quesos intensos (blandos o de pasta blanda) o quesos azules — el contraste entre dulzura y salinidad/cremosidad funciona muy bien.
Foie gras o alimentos grasos suaves: la dulzura y textura untuosa equilibra la grasa, creando un maridaje elegante.
Frutos secos o frutas desecadas: higos secos, nueces, almendras, membrillos — los sabores de fruta madura y miel del vino los complementan perfectamente.
Cocinas especiadas, exóticas o postres con miel y frutas — puede acompañar bien platos dulces-salados o especiados, incluso algunos postres de influencia oriental.
Además, se recomienda servir muy frío (6–8 °C), para que su dulzura se perciba más fresca, la fruta se subraye y los aromas florales se expresen con claridad.
Maset Moscatel de Alejandría es ideal para:
quienes disfrutan de vinos dulces y aromáticos;
momentos de sobremesa o postre;
ocasiones especiales, celebraciones o reuniones donde haya postre, queso o chocolate;
maridajes informales o refinados con queso, fruta, repostería o platos dulces/salados.
Además, gracias a su riqueza aromática, dulzura y cuerpo, se puede disfrutar con copa pausada, dejándolo respirar un poco para que se exprese mejor su bouquet floral y frutal — ideal como vino de meditación o digestivo.